La importancia de una piel sana

La piel es el órgano más grande y visible de nuestro organismo, pero no es solo una simple capa externa que recubre nuestra superficie corporal, es un conjunto de células y estructuras que nos confieren la protección frente al medio ambiente. La semana pasada os hablaba de la importancia de protegerla frente al fotoenvejecimiento por motivos fundamentalmente estéticos, hoy os hablo de la importancia de protegerla por motivos vitales.

La piel desempeña diversas funciones entre las que cabe destacar: función protectora (mecánica, físico-química, térmica, biológica y frente a la radiación solar), inmunitaria, termorreguladora, sensorial, metabólica, estética y social, aunque hoy me voy a centrar en su función como barrera.

Este órgano complejo conecta el organismo con el medio exterior actuando como una barrera selectiva de entrada y salida de sustancias, para ello cuenta con una película hidrolipídica (agua y grasa), que evita la entrada de bacterias, virus y hongos, así como la pérdida de agua y grasa.

Esta película hidrolipídica que confiere a la piel su función como barrera selectiva no es más que una mezcla de factores hidratantes naturales de la piel (agua, urea y queratina) y lípidos epidérmicos que se encargan de mantener compactada la estructura celular para que la piel se mantenga bien hidratada, firme y sana. Este film varía en cantidad y composición en función de la zona del cuerpo a considerar, la estación del año, humedad ambiental, alimentación, estrés o determinadas enfermedades como la psoriais o la atopia.

Una piel sana es de color uniforme, textura lisa, bien hidratada, y con un nivel de sensibilidad al tacto, la presión y la temperatura adecuados. Cuando la barrera natural se altera se pierde agua y elasticidad de ahí que se aprecie una piel seca,  áspera e incluso agrietada y laxa. Si no se pone remedio y la alteración continúa, se volverá más sensible a la radiación solar y a los cambios de temperatura llegando a ser más propensa a la infecciones.

En definitiva os diré que una barrera cutánea sana es sinónimo de una piel sana pero el paso del tiempo, el estrés, las condiciones medioambientales, la radiación UV… van haciendo que irremediablemente, se vaya deteriorando, sin embargo, gracias a la dermocosmética, y a estos consejos,  nosotros podemos conseguir que esto suceda muy, muy lentamente:

1.- Llevar a cabo una correcta limpieza con jabones y detergentes sintéticos ligeros pero capaces de eliminar tanto la suciedad endógena (secreción de grasa y células muertas) como exógena (contaminación, maquillaje,…). Entre sus componentes estos limpiadores han de tener emolientes y suavizantes así como un alto contenido en agua.Effaclar gel de la Roche-Posay es una buena alternativa.

2.- Protegernos de los radicales libres que rompen la estructura dérmica para ello nada mejor que usar un buen antioxidante a diario como mi favorito, Phloretin CF de SkinCeuticals.

3.- Tras el antioxidante hay que aplicar humectantes que contienen hidratantes que compensan la pérdida de los factores de hidratación natural y lípidos que rellenan los espacios dejados por los que se van perdiendo. Endocare Day Sense de IFC o cualquiera de los productos de la gama Hydra-Chrono de Lierac entre otros.

4.- Usar un fotoprotector a diario y reaplicarlo tantas veces sea necesario ya que se ha demostrado que se necesita una dosis muy pequeña de radiación ultravioleta  para bloquear la síntesis de los factores naturales de hidratación que constituyen el manto hidrolipídico así como para debilitar los queratinocitos ocasionando una pared más delgada e inestable. Os aconsejo Heliocare Color GelCream SPF50

Como veis una barrera cutánea en perfectas condiciones es crucial para tener una piel sana y me complace deciros que en breve os hablaré de un revolucionario producto para ello y es que al menos yo, quiero envejecer, cumplir 100 años, pero que se note lo más tarde posible y quiero comenzar cuidándome ya!!!

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Elisa Isabel Roldán Jiménez

Licenciada en Farmacia y especialista en dermocosmética Ver todos los artículos publicados Sígueme en youtube · facebook · twitter

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